Dicen que la mejor manera de enseñar es con el ejemplo, así como también dicen que a donde vayáis hacéis lo que miréis.
La esencia de cada uno de nosotros se demuestra con las cosas simples, el pedir permiso, decir buenos días, dar las GRACIAS!!! Saber pedir disculpas de corazón, guardar silencio (que tanto me cuesta), situaciones que nos develan minuto a minuto como somos.
El simple hecho de hacer el esfuerzo de mirar hacia dentro de nosotros mismo, tratar de buscar esos momentos de introspección cuesta mucho y en algunos casos genera un vértigo que genera vacío en el estomago y no todos nos asomamos al precipicio a mirar.
Me pregunto muchas veces cuales son las ansias de las personas por prevalecer ante los demás, y logro entender que cada uno lleva su ritmo, algunos mas rápidos que otros, cada quien disfruta de su velocidad.
Debemos entender que debemos aprender a dejar pasar, evitar ser obstáculos en el camino, eso es como cuando uno va manejando en carretera y vas a cierta velocidad y te piden paso, te cambian luces, tocan corneta, etc., es allí donde me aparto y dejo pasar! Es mejor que el que va apurado pase, no ganamos nada frenando al otro.
Reflexionemos, tratemos de mirar un poco hacia nosotros mismo y preguntemos a nuestro ser interior que deseamos hacer, que limite tenemos y afrontemos con humildad los retos que la vida nos pone al frente, finalmente como dicen las personas de edad avanzada, DIOS aprieta pero no ahorca!!!
Así que a planear y disfrutar!
Victor H. Manzanilla R. – @elexitocontigo
